Normas básicas de aplicación
Reglas básicas para la correcta aplicación de la fototerapia con la biolámpara Biostimul
La fototerapia debe aplicarse sobre la piel limpia y descubierta. El jabón u otro limpiador es suficiente para lavar la piel, el maquillaje debe ser eliminado de la cara. De lo contrario, podría aumentar la reflexión de la luz en la piel y reducirse así la eficacia de la terapia.
- El cono de luz debe incidir siempre lo más perpendicularmente posible sobre la piel seca y limpia de la zona tratada. Es aconsejable respetar la distancia de aplicación recomendada de 1,5 - 2,0 cm si se desea mantener la máxima profundidad de penetración. Si colocamos la superficie de aplicación de la biolámpara directamente sobre la piel, la penetración de la luz se reduce, lo que se debe a la humectación natural de la piel (hidratación), que crea una película de agua bajo la superficie, que impide entonces la penetración ideal de la luz. La segunda razón para mantener la distancia son también las normas de higiene (evitar la contaminación de la zona de aplicación y, por tanto, la posible propagación del problema a otras partes del cuerpo o a otros usuarios).
- En caso de aplicación en una zona de la piel cubierta de vello, es importante permitir la mayor exposición posible a la luz directa, ya que el vello refleja muy bien los rayos luminosos (es aconsejable peinarlo gradualmente).
- Las dosis totales de luz polarizada dependen del tipo de tejido, de los problemas indicados, de la respuesta individual a la fototerapia y de otros factores. En general, en el contexto de enfermedades crónicas o degenerativas (como la artritis), se recomienda optar por dosis más bajas (es decir, 2-3 aplicaciones al día con una duración máxima de 15 minutos). En casos agudos (heridas frescas, etc.), se prefiere un mayor número de aplicaciones con un tiempo de aplicación más largo (4-5 aplicaciones de 20-30 minutos). Por experiencia, el principio es que en los pacientes más jóvenes la respuesta espontánea del organismo a la fototerapia es mayor y, por lo tanto, se puede elegir un tiempo de aplicación más corto (de 1/3 a 1/2), en los pacientes de más edad la duración de la aplicación debe aumentarse proporcionalmente.
- La fototerapia es un método que no puede sobredosificarse, pero siempre que se respete el número y la duración de las aplicaciones recomendadas para cada indicación, es suficiente para conseguir el efecto óptimo. Por supuesto, también deben tenerse en cuenta las necesidades individuales de cada usuario, pero considere que el uso de 10 unidades de tratamiento cada tres horas al día, en el caso de problemas crónicos (como artrosis, etc.), no supondrá diferencias más significativas ni producirá un efecto más rápido que si utiliza sólo tres aplicaciones al día con un descanso de 6 horas.
Contraindicaciones - inadecuación de la aplicación
Cada método de tratamiento, tiene sus ciertas limitaciones, que siempre deben ser respetadas. Colectivamente, siempre se enumeran en las instrucciones bajo el nombre - contraindicaciones.
La fototerapia pertenece a los métodos terapéuticos que tienen un rango muy pequeño de estas restricciones y también se encuentran entre los llamados relativos - es decir, aquellos que no prohíben el uso, pero sólo definen las áreas en las que no es apropiado llevar a cabo la aplicación. Por lo tanto, respete estas recomendaciones en el caso de estas limitaciones.
- Oncología - en el caso de cáncer, no es aconsejable aplicar fototerapia en la zona donde está localizado el problema. Es aconsejable utilizar la fototerapia para tratar las posibles cicatrices postoperatorias de tumores malignos hasta 6 meses después de finalizar la quimioterapia. Por lo demás, los pacientes con estos problemas médicos no tienen limitado su uso.
- Epilepsia: los pacientes con esta afección no deben someterse a aplicaciones en la zona del cuello y la cabeza y, preferiblemente, deben utilizar el modo pulsado lo menos posible. Por lo demás, pueden utilizar la fototerapia sin problemas.
- Iluminación directa de la retina - en el caso de la biolámpara Biostimul, no es necesario utilizar equipos de protección (gafas u otros protectores oculares especiales); basta con cerrar los ojos para evitar que la luz llegue directamente a la retina. En cualquier caso, no puede haber daños para la visión, pero la aplicación directa no es nada agradable para el usuario.
- Hiperfunción (aumento de la función) de la glándula tiroides: se trata de un caso específico de la enfermedad y los pacientes no deben utilizar fototerapia en la zona del cuello. En relación con esto está la prohibición de tratar la cicatriz después de la cirugía de tiroides antes de 6 meses después del procedimiento. Por lo demás, también en estos pacientes, las aplicaciones en otras zonas no presentan ningún problema.
- Aplicación directa sobre un foco agudo de infección o sobre un depósito de pus envainado (absceso), a menos que se haya esterilizado (abierto y limpiado) previamente y a menos que se hayan desplegado antibióticos, ya que esto podría conducir a su activación y, por tanto, a posibles complicaciones de salud (como, en el mejor de los casos, una prolongación general del tratamiento.
- Estados febriles - en caso de fiebre (temperatura corporal superior a 37,5 °C) es aconsejable esperar a que la temperatura haya disminuido. Principalmente porque podría reducirse la respuesta del organismo a la fototerapia.
Por otro lado, no hay que preocuparse:
- Cuando se utiliza la fototerapia en la zona genital. Nunca se ha observado ningún efecto negativo de la fototerapia no invasiva en estos órganos.
- En personas con marcapasos. Según las últimas informaciones disponibles, en cualquier caso no hay que preocuparse por reacciones negativas. Las referencias anteriores en la literatura señalaban posibles peligros, pero se trataba de datos erróneos, que una parte del público profesional sigue difundiendo por inercia.
- Pacientes con implantes corporales, ya sean metálicos (por ejemplo, prótesis totales de rodilla) o de otra naturaleza (por ejemplo, plásticos, prótesis de silicona, etc.).
- En niños en la zona del cartílago de crecimiento. Otro de los rumores que han sido desmentidos por estudios de médicos ingleses que han señalado que el temor a dañar el cartílago de los niños es infundado.